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Entre proyectos fallidos y trabajos para televisión, pasaron cinco años desde el estreno del último trabajo de Rupert Wyatt. Un cineasta que desde el inicio de su carrera mostró mucho futuro, pero que no siempre se salió con la suya a la hora de hacer realidad esas promesas. Un realizador que relanzó con éxito la reconocida franquicia de los simios, pero que no tuvo la posibilidad de continuar su trilogía. Uno que apuntó alto en el terreno de los superhéroes y buscó llevar a la pantalla a un mutante amante de las cartas, pero que debió conformarse con otro tipo de jugador en The Gambler.

La carrera de Rupert Wyatt es digna de análisis, tanto por lo que ha hecho como por lo que no. Y el estreno en cines de Captive State, su esperado nuevo trabajo, ofrece una excelente oportunidad como para poner el foco en ella.

Ticks (1999)
Subterrain (2001)
Get the Picture (2004)

El realizador tuvo a su cargo tres cortos antes de llevar adelante su primera película. Ticks es uno de 10 minutos, en el que ocho personas en un bar cuentan los últimos cinco minutos antes de la medianoche, el 31 de diciembre de 1999. No se lo puede conseguir online, lo mismo que Subterrain, aunque de este sí se puede ver un avance publicado por el propio cineasta. Este también apela al clima festivo, ambientándose en la Nochebuena del 2001. Un solitario pegador de afiches es llevado en un viaje nocturno por el espíritu de un fallecido conductor de trenes. Habiéndose resignado a una vida de trabajo monótono y rutinario, su aburrida existencia es cuestionada por los espíritus de aquellos que murieron en la estación a lo largo de su historia. El avance demuestra promesa, con buen trabajo de luces y sombras, así como el gran acompañamiento musical de La Valse d’Amelie, de Yann Tiersen.

Subterrain Trailer from Rupert Wyatt on Vimeo.

Get the Picture, por otro lado, se puede ver completo y anticipa algo del futuro de su director, sobre todo en lo que se refiere a la capacidad para mantener alta la tensión. En este corto, dos corresponsales de guerra son llevados a una ciudad recientemente bombardeada en Medio Oriente. Los potenciales responsables están por ser ejecutados en frente de una turba iracunda de sobrevivientes. Uno de los periodistas duda de la culpabilidad de los adolescentes prisioneros; el otro cree que no están ahí para elegir bandos sino para tomar fotos. Y en esos 10 minutos el director expone bien su idea. Nuevamente da cuenta de ese buen trabajo de iluminación que se veía antes, en tanto que se permite hacer un comentario poco velado sobre la guerra y el rol de los medios. Además, es su primera colaboración con Brian Cox, quien protagonizaría su ópera prima.

The Escapist (2008)

Le llevaría unos años más tener lista su primera película, un proyecto pequeño que le abrió las puertas de Hollywood. Cox encabeza el equipo frente a cámaras, que incluye varias caras familiares como las de Dominic Cooper, Joseph Fiennes, Liam Cunningham o Damian Lewis. A todo el mundo le gusta una buena película de escapes carcelarios y esta es una sólida exponente dentro del subgénero. Una que ofrece una mirada inventiva con una narrativa doble. Está la del escape en concreto y la de su preparación, específicamente los días previos y todos los eventos que llevaron a que esa fuga se ponga en marcha. Cruda, tensa, con buenos personajes y un final inesperado, supuso una excelente carta de presentación para el cineasta inglés, que del Festival de Sundance pasaría sin escalas a uno de los films más grandes del 2011.

Rise of the Planet of the Apes (2011)

La película que terminaría de consolidarlo como un director a tener en cuenta. 20th Century Fox apostó por un realizador de poca experiencia y este pagó con creces. Un éxito de crítica y taquilla, Rupert Wyatt entregó no solo lo que sería uno de los mejores tanques del 2011, sino que además le abría la posibilidad al estudio de continuar al desarrollo de una franquicia relanzada. El realizador inyectó nueva vida a una serie que ya incluía cinco películas en su planteo original y que ya había recibido una remake una década atrás. Una efectiva historia de origen, nos regaló otro memorable personaje producto del trabajo de Andy Serkis, como es el gran Caesar.

The Gambler (2014)

«Tienes que saber cuándo mantenerlas, cuándo taparlas, cuándo retirarte, y cuándo correr. Nunca cuentes tu dinero mientras estés sentado a la mesa. Habrá tiempo suficiente para contarlo, cuando se haya terminado de repartir»

Kenny Rogers canta con claridad en The Gambler. Cada apostador sabe que el secreto para sobrevivir es saber lo que hay que descartar y lo que hay que mantener. Pero Jim Bennett dice que él no es un apostador. De hecho, parece cómodo en hacer totalmente lo opuesto a lo que indica el sentido común. Pareciera que quiere perder. Juega fuerte, no menos de 10 mil dólares por mano. Y es capaz de tirar todo por la borda, por nunca saber cuándo parar. O por no querer hacerlo.

Una suerte de remake de la película homónima de 1974, esta cuenta con Mark Wahlberg al frente del elenco. Un otrora escritor que enseña literatura en la universidad y apuesta hasta lo que no tiene por las noches. Que se endeuda gravemente con peligrosos prestamistas y que en ningún momento parece importarle. Más allá de su notoria baja de peso, el actor nunca resultó convincente como el corrosivo protagonista, un niño aburrido y de familia rica que parece necesitar algo de caos en su vida. Tiene grandes trabajos de John Goodman y Jessica Lange, pero no logró estar a la altura de todo lo que prometía. Especialmente por su particular mirada al mundo del juego –la adicción es una elección- y a los que lo controlan –todos los prestamistas quieren que el protagonista triunfe-, en tanto que Jim, por más carismático que se lo quiera hacer ver, no deja de ser un sujeto desapegado emocionalmente que no tiene problemas en poner en riesgo a su familia y seres queridos.

Proyectos Cancelados

Son tantos que hace falta una sección aparte. Si bien ha trabajado en otros terrenos a lo largo de estos últimos años, como la televisión –con los episodios piloto de TURN y The Exorcist– y la publicidad, algo que se ha hecho notorio respecto a este realizador es la cantidad de títulos a los que se vinculó para después apartarse. En forma reciente se conoció el motivo por el que se vieron truncados sus planes de llevar adelante la película de Gambit, que hubiera sido parte del Universo X-Men con Channing Tatum al frente. Todo se redujo al fracaso comercial de Fantastic Four, lo que llevó a Fox a reconsiderar sus planes para lo que evidentemente se interpretó una apuesta de riesgo. Ese puede ser el caso más conocido, pero hay más.

¿No es raro que un director que lleve adelante un exitoso relanzamiento y de pie a una franquicia no vuelva para la continuación? Eso suele ser una práctica habitual dentro de Hollywood, pero este no fue el caso. Mientras desarrollaba Londongrad, una película sobre el espía ruso asesinado Aleksandr Litvinenko –con Michael Fassbender para dicho papel-, tuvo que dar un paso al costado cuando Fox lo convocó para hacerse cargo de Dawn of the Planet of the Apes. Sin embargo, al proponer una reescritura del guion, el estudio no se mostró conforme y decidió tomar un camino separado. Posteriormente se puso a trabajar en un thriller futurista titulado Agent 13, con Charlize Theron al frente, pero se alejó para concentrar su atención en The Equalizer, con Denzel Washington. Pero como el estudio tenía una visión diferente a la suya, en este caso Sony Pictures, también se fue. Su lugar lo ocupó Antoine Fuqua y desde entonces ya entregó dos películas en la serie, mientras que Matt Reeves llenó la vacante en la franquicia de El Planeta de los Simios e hizo la segunda parte y el final de la trilogía.

Posteriormente pasó a enfocarse en Goliath, un proyecto del cual no hay muchas referencias y que se presume que no ha avanzado, mientras que finalmente se estrena en cines Captive State, su esperada siguiente película, cinco años después de The Gambler. Claro que todavía hay suficientes oportunidades como para dar un paso al costado de algún otro título en marcha, como la próxima serie de Halo. En esta oportunidad, un cambio en el cronograma de producción forzó su salida, con lo que todo se resumió a una cuestión de agenda. Por lo pronto no está claro cuál será su siguiente trabajo, aunque tiene listado un proyecto titulado Storm King que estaría en pre-producción. No hay precisiones sobre dicho film, con lo que aguardamos atentos por novedades. Esperamos, claro, que no tengan que ver con su salida.