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A tirar los dados, Chris Pine (Wonder Woman, Hell or High Water). El actor protagonizaría Dungeons & Dragons, la adaptación del juego de rol de fantasía que llegará de la mano de Jonathan Goldstein y John Francis Daley (Game Night), según confirmó THR.

El juego ha generado millones de jugadores y fanáticos a nivel mundial en las cuatro décadas desde su creación, en manos de Gary Gygax y Dave Arneson. Pine aún está en conversaciones para sumarse al proyecto de Paramount Pictures, que cuenta con guion de Michael Gilio y que producen Brian Goldner y Stephen Davis por parte de Hasbro -bajo el techo de AllSpark Pictures, una compañía que se ocupará del ala cinematográfica de la juguetera- y Courtney Solomon y Allan Zeman, para Sweetpea Entertainment. Más allá de estos datos, aún falta el más importante: la trama de la transposición.

Su popularidad llevó a la propiedad a una serie animada de televisión en 1983, así como también a una versión live-action para la pantalla grande en el 2000, dirigida por el mencionado Courtney Solomon. La misma es recordada principalmente por ser un fracaso de crítica y taquilla, sin embargo dio lugar a una secuela en forma de película para TV –Dungeons & Dragons: Wrath of the Dragon God (2005)- así como también a Dungeons & Dragons: The Book of Vile Darkness (2012), directo al formato hogareño. Pero la idea de llevarla a la pantalla grande se remonta desde el año 2000 de la mano de New Line Cinema y con Jeremy Irons (Justice League, The Man in the Iron Mask, The Borgias) como protagonista, y luego de una disputa por los derechos del mítico juego -en la que Warner Bros. tuvo su posibilidad y hasta pensó en Ansel Elgort (Baby Driver, The Fault in Our Stars) como cabeza del proyecto- Paramount llegó a un acuerdo con Hasbro para su producción y distribución, apuntando inicialmente a Chris McKay (Robot Chicken, The LEGO Batman Movie) para dirigirla.

A la espera del tan postergado estreno de Wonder Woman 1984 -que llegará a los cines y HBO Max al mismo tiempo-, Pine se encuentra inmerso en el trabajo para Don’t Worry Darling, un thriller psicológico ambientado en la década del ’50 de la mano de Olivia Wilde (House M.D., TRON: Legacy) y el reboot de The Saint que dirigirá Dexter Fletcher (Rocketman, la próxima Sherlock Holmes 3).