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HBO se anotó un éxito de la mano de Watchmen, serie que reabrió la seminal novela gráfica de Alan Moore y Dave Gibbons para dar pie a un drama absorbente y oportuno, que instaló una conversación en torno a las instituciones, la cultura, el racismo y, claro, los héroes enmascarados. Como todo éxito televisivo o cinematográfico en forma obligada da pie a múltiples continuaciones, se mantenía la duda de si tendría una segunda temporada o si concluiría con los nueve episodios emitidos durante el 2019. USA Today parece haber resuelto la incógnita, y una nueva tanda de episodios es altamente improbable.
Casey Bloys, el jefe de programación de HBO, dialogó con el mencionado sitio al respecto de Damon Lindelof (Lost, The Leftovers), el responsable del programa. «Él brillantemente tomó esta novela gráfica y la destripó y creó un mundo nuevo… En verdad, es lo que quiera hacer Damon. Si hay una idea que lo entusiasme para otra temporada, otra entrega, quizás como Fargo o True Detective, o si quiere hacer algo completamente diferente. Estamos muy orgullosos de Watchmen, pero estoy más interesado en lo que Damon quiera hacer», reveló el ejecutivo. Y Lindelof recogió el guante: ya contó la historia que quería contar y no tiene interés en una segunda temporada, aunque da su bendición a HBO por si quieren encarar una nueva entrega, con otro guionista y productor. «Sería difícil de imaginar hacerlo sin Damon involucrado de alguna forma», sentenció Bloys.
«Nada termina nunca», son las recordadas palabras del Doctor Manhattan, con lo que bien podría llegar un momento en el que HBO decida que es hora de revisitar a Watchmen. Dios no permita que Moore y Gibbons recuperen los derechos de su obra, con lo que quizás una antología enfocada en otro personaje y en otra época podría ser del interés de la cadena, si consiguiera al talento adecuado para llevarla adelante.
Regina King (American Crime, The Leftovers) y Jean Smart (Legion, Fargo), que vienen de ganar en los Critics’ Choice Awards por sus trabajos, son dos de las que encabezaron el equipo frente a cámaras, que también contó con las actuaciones de Jeremy Irons (Justice League, The Man in the Iron Mask, The Borgias), Tim Blake Nelson (Fantastic Four, O Brother, Where Art Thou?), Yahya Abdul-Mateen II (The Get Down, Aquaman), Louis Gossett Jr. (An Officer and a Gentleman), Adelaide Clemens (Silent Hill: Revelation), Andrew Howard (Taken 3, Limitless), Tom Mison (Sleepy Hollow), Frances Fisher (Resurrection), Sara Vickers (The Crown), James Wolk (Zoo, Tell Me a Story), Hong Chau (Downsizing) y Don Johnson (Miami Vice, Brawl in Cell Block 99), entre otros.
«Ambientada en una historia alternativa, donde los ‘superhéroes’ son tratados como forajidos, Watchmen abraza la nostalgia de la revolucionaria novela gráfica original mientras intenta abrirse su propio nuevo camino». No se trató de una adaptación de la novela gráfica, a la que se Lindelof consideraba suelo sagrado y que no se animaría a trasponer -aunque sí a remixar-. Tampoco sería una secuela, sino una nueva historia con nuevos personajes, ambientada en el presente para que resuene con los tiempos que corren y no aquellos anclados a los años ’80. «Algunos de los personajes serán desconocidos… Nuevas caras. Nuevas máscaras para cubrirlas. También pretendemos revisitar el siglo pasado de los aventureros enmascarados a través de un par de ojos sorpresivo y a la vez familiar… y es aquí donde asumiremos nuestros mayores riesgos», sostuvo en su momento el productor.
Watchmen es la enorme novela gráfica de Moore y Gibbons, la cual fue llevada al cine en el 2009 por Zack Snyder. Originalmente publicada como una mini-serie de 12 números en 1986, pronto se convirtió en uno de los cómics más celebrados de la historia. Malin Akerman, Billy Crudup, Matthew Goode, Jackie Earle Haley, Jeffrey Dean Morgan, Carla Gugino y Patrick Wilson encabezaron el equipo frente a cámaras en la versión del realizador de Batman v Superman: Dawn of Justice. Aquella transcurre en Estados Unidos, en los años ’80. La Guerra Fría está en su apogeo y los superhéroes, que antes habían sido admirados, ahora son perseguidos por la ley. Un día aparece muerto uno de ellos, «El Comediante». Su amigo Rorschach, el único héroe enmascarado en activo, emprenderá la investigación de su asesinato, tras el que se oculta algo muy importante.
