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Ha pasado un poco más de ocho años desde que Remedy Studios publicó Alan Wake, el aclamado videojuego de plataformas como Xbox 360 y PC. Es desde entonces que los fanáticos más acérrimos especulaban con una posible secuela o una adaptación al terreno live-action, e hizo falta cerca de una década para que se hiciera oficial. Vía Variety se conoció que el juego pasará a la pantalla chica de la mano del productor y guionista Peter Calloway (Legion, Cloak and Dagger). Además estará acompañado de su creador Sam Lake como director ejecutivo y supervisor, por lo que el proyecto no se deslinda completamente de quienes concibieron ese microcosmos que es Bright Falls, principal escenario de la travesía del protagonista.
Alan Wake nació de la visión de introducir elementos narrativos del cine al videojuego y para esto se bebió de directores reconocidos como Alfred Hitchcock, David Lynch e inclusive de escritores de horror como Stephen King. La historia narra el drama del reconocido autor del título que, buscando salir de su bloqueo creativo, visita al lúgubre pueblo de Bright Falls, lugar rodeado de frondosos árboles y cristalinos lagos. Es aquí donde las cosas se comienzan a complicar, lo que lleva a Alan Wake a enfrentarse con que la realidad y la ficción son más cercanas de lo que él creía. Este planteo cinematográfico, que jugueteaba entre el thriller psicológico con algunas pinceladas de surrealismo y drama humano, ya hizo que el proyecto fuera del interés de distintos estudios, según reconoció Tomas Harlan, socio de la productora Contradiction Films.
Él mismo afirmó que la serie es ya casi una realidad, al reconocer: «Alan Wake era básicamente una serie de TV que se introdujo en un videojuego, esa era la visión de Sam (Lake). Planeamos trabajar de cerca con él en nuestro show. Sam es una gran parte de este proyecto. Este es su bebé». Fue en esta misma entrevista donde manifestó que no será una adaptación al uso de la trama del videjuego, sino más bien una que utilizará las mismas bases para crear algo más grande de lo que aquel abarcaba. Las afirmaciones de Harlan, junto a las personas involucradas, dejan un buen sabor de boca que invitan a ser optimistas con el proyecto. Todavía no hay una fecha de estreno definida, pero se prevé que la pre-producción inicie en algún punto de 2018.
