Ant-Man and the Wasp: ¿qué pasa en la escena post-créditos?

Por supuesto que hay spoilers.

Ant-Man and the Wasp es una sólida secuela que explora un diminuto rincón del Universo Marvel. Repleta de humor, vuelve a abrazar un tono más ligero para lo que es el armado colectivo después de que Avengers: Infinity War le estrujara el pecho al mundo. No depende de las referencias permanentes a otros superhéroes, tiene la capacidad de sostenerse por sí sola como una película de pretensiones limitadas y satisfacción garantizada. Además instala a La Avispa como una de las grandes superheroínas del MCU. Se puede debatir si ella es la mejor -tampoco es que hay tanta competencia-, pero no quedan dudas de que es la primera con la capacidad de opacar al héroe y salvarlo en numerosas oportunidades. Pero es una película de Marvel y, como tal, hay escenas post-créditos, las cuales vamos a abordar a continuación.

Sabíamos que Scott Lang y Hope Van Dyne no fueron parte del combate por el destino del Universo. Al igual que Clint Barton / Hawkeye, el primero se entregó y quedó en arresto domiciliario porque es un hombre de familia, en tanto que obligó a Hank Pym e hija a pasar a la clandestinidad. La película deja en claro que pasaron dos años de los eventos de Captain America: Civil War, pero no precisa cuándo transcurre en relación a la batalla con Thanos. Eso, claro, hasta la primera escena después de que los créditos empiezan a correr. En ella se ve al cuarteto de Scott, Hope, Hank y la recuperada Janet en una terraza para conducir un nuevo experimento. Ant-Man se vuelve subatómico y hace otra incursión al Reino Cuántico para procurar energía para la otrora villana Ghost, quien parecería haberse vuelto una aliada. En su intento por volver a su mundo, no hay respuesta de ninguno de los otros tres. La cámara vuelve hacia donde ellos deberían estar y se ve que se han convertido en polvo, después del chasquido de Thanos. Ouch.

Esto nos pone un paso adelante en relación a lo que sabemos de The Avengers 4 después del fin de la anterior. Tras aquella devastadora conclusión vimos que Hulk, Rocket Raccoon, Black Widow, Nebula, Okoye, Thor, War Machine, Capitán América e Iron Man están vivos, en tanto que podíamos especular con el posible bienestar de otros. Los Vengadores que no perecieron, no obstante, quedan desconsolados tras los recientes eventos y no tienen ninguna respuesta. No conocemos cómo es que planean encarar la secuela. Ant-Man, por su parte, no solo es otro de los héroes que se mantiene con vida, sino que es uno que está atrapado en el Reino Cuántico. Y eso plantea varios interrogantes para lo que se viene. ¿Scott quedará atascado ahí y no formará parte de la nueva batalla contra Thanos? Improbable. Entonces, ¿cómo saldrá de ahí? ¿Podrá contribuir desde allí? Janet Van Dyne dejó en claro que al Reino Cuántico se lo puede recorrer y evolucionar gracias a sus propiedades. Por suerte no tendremos que esperar un año para la respuesta, dado que falta cada vez menos…

Ah, claro. Hay una escena al final de todo. Una de esas que Marvel deja para burlarse del público por quedarse sentado a lo largo de los créditos completos a la espera de algo más. Y curiosamente es una secuencia que ya se había visto en algún adelanto -no recuerdo que un avance spoileara una escena post-créditos como en este caso-, una imagen difícil de olvidar y que seguramente llamó la atención del espectador. Es la hormiga gigante que cubría el puesto de Scott mientras este incumplía su prisión domiciliaria, que toca la batería electrónica. «¡Nunca más me quedo hasta el final! ¿A quién engaño? Es obvio que me voy a quedar igual…»