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Desde pequeño se hizo conocido en 3rd Rock from the Sun (1996-2001) y, más tarde, afirmó su paso con el co-protagónico en 10 Things I Hate About You (1999) junto a Heath Ledger. Actor, cantante, director y productor, Joseph Leonard Gordon-Levitt se consolidó como un artista de extremada versatilidad a la hora de interpretar papeles bien distintos entre sí. Hoy sopla 38 velitas y, en un brindis a su ascendente carrera, queremos resumir a este genio en 10 excelentes películas que protagonizó:
Hesher (2010)
Hesher, un anarquista de cabello agresivo, boca sucia y puro metal en sus venas, sacude la vida de un joven niño cuando, sin ser invitado, se muda a su garage. Después de una reunión problemática entre los dos, el niño entra a su casa al día siguiente y se encuentra cara a cara con el rebelde ya instalado y en ropa interior. El ambiente depresivo de la casa del niño, junto con un padre ensimismado por la reciente muerte de su esposa, terminan favoreciendo la presencia de Hesher en la vida del pequeño, creando así una extraña, tormentosa e hilarante amistad debido al humor negro presente en los diálogos y acciones del protagonista. Gordon-Levitt es casi irreconocible físicamente y, aunque su personaje es asqueroso, enojado e impredecible, va ganando nuestra simpatía con el correr de los minutos. Hesher incluye también la participación de Natalie Portman, en una versión desordenada y pobre pero con esa sonrisa encantadora a la que ya nos tiene acostumbrados. Un drama que habla sobre pérdidas, duelo, madurez y defiende la idea de que, a veces, es necesario romper ciertas reglas para que la vida tome un nuevo significado.
Snowden (2016)
La épica historia del hombre que en el 2013 puso en jaque a los Estados Unidos, al develar los documentos del programa de vigilancia mundial secreto de la NSA, abriendo los ojos del mundo y cerrando las puertas de su propio futuro. Una película biográfica que obligó a tomar conciencia a la población mundial en relación con la privacidad -o falta de ella- y las formas sombrías y manipuladoras con las que el gobierno estadounidense trata la información privada de todos los ciudadanos del mundo. Con ritmo y narrativa que llaman la atención en todo momento, la biografía de Edward Snowden cuenta con una interpretación de Gordon Levitt que logra cambiar su voz y gestos de manera impresionante. Un excelente thriller político, reflexivo y biográfico en el que Oliver Stone muestra que todavía está en buena forma, regalándonos una historia desde un punto de vista más amplio al que se esperaba.
(500) Days of Summer (2009)
Tom, un escritor de tarjetas de felicitaciones y un romántico desesperado, se sorprende totalmente cuando su novia, Summer, repentinamente lo abandona. Analizando los 500 días que estuvieron juntos descubrirá en qué parte falló su relación y, en el proceso, descubrirá las verdaderas pasiones en la vida. Dejando de lado una narrativa lineal, la obra que catapultó a la fama al actor se expone de manera dispersa, haciendo que la historia sea aún más palpable y orgánica. Este movimiento inteligente funciona para hacer ante los ojos de la audiencia a un protagonista agradable, y de Zooey Deschanel la perfecta antagonista.
Una exploración impecable de una relación fracasada, una celebración de amantes apasionados pero sin llegar a ser definida como una historia de amor, en su aspecto más juvenil e infantil. Una historia sobre las relaciones y los buenos tiempos que siguen siendo buenos, a pesar de que no se pueden crear con la misma persona. El amor se recrea a sí mismo, como si fuera algo nuevo, surgiendo de la nada, tal como el otoño salió del verano. Los finales felices no son tan comunes en la vida real y es genial cuando nos damos cuenta de que no todo está perdido en la primera derrota. Simplemente no podemos rendirnos, porque el verdadero amor puede estar a la vuelta de la esquina
The Walk (2015)
En 1974 las Torres Gemelas del World Trade Center aún prevalecían en la ciudad de Nueva York y eran consideradas los edificios más altos del mundo. The Walk cuenta la historia de la audacia del acróbata Philippe Petit quien, el 7 de agosto de ese mismo año, cometió lo que se conoció como «el crimen artístico del siglo«: trepó ilegalmente a la cima de las torres y tiró un cable entre ambas para luego caminar por el mismo sin ninguna protección o seguridad, hasta que que fue arrestado por la policía. Con la ayuda de sus amigos más cercanos, ideó un plan infalible. La enorme cobertura de la hazaña realizada por los medios, junto con la euforia del público al darse cuenta de la acrobacia, resultó en la retirada de los cargos formales.
Con la emotiva voz en off del mismísimo Petit, la hazaña del francés ha sido objeto de un documental pero nunca con tanta intensidad. Robert Zemeckis (Back to the Future) sabe cómo convertir una buena historia en entretenimiento como pocos; y si a esto le sumamos el excelente acento y dominio del idioma francés de Joseph Gordon-Levitt obtenemos una obra que nos enseña lo que realmente significa el arte elevado a su máxima expresión: exaltar la vida y el alma con pasión desenfrenada.
50/50 (2011)
Adam (Joseph Gordon-Levitt) es un joven de 27 años al que se diagnostica con cáncer. A partir de ese momento, su novia novia intenta cuidarlo pero su carácter egoísta sale a flote, su amigo (Seth Rogen) intenta ver el lado positivo de la enfermedad y su madre lo asfixia con llamadas. Para lidiar con su nueva situación, tendrá que acudir a terapia. Allí conocerá a Katherine (Anna Kendrick), una inexperta terapeuta con la que compartirá momentos incómodos y un inapropiado coqueteo.
Una película que busca retratar la enfermedad como algo común e incluso cotidiano, que termina afectando a niños, adolescentes, adultos y ancianos. 50/50 busca entender la emoción por la vida y el afecto de las personas que aman sin decir que aman, pero que en las horas más difíciles están ahí. Con mucha naturalidad, vamos sintiendo el dominio de la soledad y la desesperación del protagonista a lo largo de 100 minutos. Un drama original, interesante, bien interpretado e incluso mejor escrito. Muy simple pero con un gran tono para la reflexión y la inspiración, sin dejar incluso el enfrentamiento de escenarios difíciles con un sentido de diversión, emoción y empatía desde el mismísimo comienzo.
Brick (2005)
Con varias alusiones al cine negro, el debut de Rian Johnson gira en torno a Brendan (Gordon-Levitt), un joven con una enorme capacidad para resolver problemas a través de un razonamiento extremo junto con astucia y destreza física. Después de años al margen de lo que sucede en la escuela secundaria a la que asiste, Brendan recibe una enigmática llamada de su ex novia quien desapareció días después, provocando que vuelva su temple detectivesco para resolver esta incógnita. Un coronamiento del misterio que cuenta con los mejores elementos del género de detectives. Aunque la atmósfera se refiere constantemente a los clásicos en blanco y negro, la extrañeza del film absorbe al espectador en una trama algo convulsiva. No sólo el protagonismo queda a cargo de nuestro cumpleañero sino que cuenta con la participación de Lukas Hass (Witness, Inception) y Emilie de Ravin (Lost, Roswell).
Premium Rush (2012)
De aspecto independiente y con una narrativa algo pop y divertida, la creatividad de los escritores para encontrar una historia sobre los repartidores que andan en bicicleta en Nueva York es algo completamente elogiable. Para el mensajero ciclista Wilee, esquivar autos veloces, taxistas locos y millones de peatones es solo un día más en el trabajo. Siendo uno de los mejores en una labor de por sí peligroso, Wilee no está preparado para lo que sucederá después de su último recorrido del día, convirtiéndose en una persecución de vida o muerte a través de Manhattan.
Usando gráficos y animaciones mezclados para transmitir alguna información, el ambiente es algo ligero y divertido. Impecables escenas de acción que nos dejan constantemente preguntándonos cómo se filmaron en las concurridas calles de Nueva York. Gordon-Levitt lleva la película con su habitual gran carisma, pero esta vez el villano es uno sin igual: un odiable Michael Shannon. Premium Rush es intransigente y entretenida e incluso violenta por momentos. Vale la pena por sus escenas de gran velocidad, con la particularidad de que se usan bicicletas. Rápida y de movimiento perpetuo, logra que el espectador no desee siquiera pestañear por miedo a perderse tan solo un fragmento del film.
Looper (2012)
Es el año 2044 y Joe tiene la tarea de eliminar a los blancos de la mafia enviados desde el futuro. Es un looper bien pagado por su servicio, pero también tiene un precio a pagar: puede vivir durante 30 años, después de este período, la mafia lo perseguirá y lo enviará al pasado para que lo mate su versión más joven. Este es el ciclo -o el final del ciclo- para cada uno de los asesinos. La versión posterior de Joe (Bruce Willis) se niega a aceptar la muerte en forma pasiva y logra escapar al regresar al pasado. Es el comienzo de una persecución inusual donde el Joe del presente desea matar al del futuro, mientras que el del futuro no puede eliminar al del presente ya que esto terminaría consigo mismo. ¿Confundidos? Sepan que hay mucho más.
Gordon-Levitt tuvo que usar lentes de contacto transparentes y maquillaje para que su cara tuviera la forma de Willis. El resultado es impresionante debido a la similitud entre los actores, dejando las expresiones faciales del primero más endurecidas y causando cierta extrañeza al principio, diluida durante el resto de la película. El resultado es una producción de acción que valora el guion, creando situaciones que colocan los diferentes puntos de vista de las dos versiones de Joe cara a cara. No es fácil de entender y, por esta razón, se la aprecia mucho más, dejando el deseo de volver a verla una segunda vez cuanto antes.
Don Jon (2013)
Esta es la historia de Jon Martello: un hombre cuya vida consta de trabajar como camarero, llevar a bellas mujeres a la cama, cuidar su automóvil, lidiar con su familia y asistir los domingos a la iglesia. Esto cambia cuando conoce a Barbara (Scarlett Johansson) de quien se enamora y termina cambiando varios aspectos de la vida por ella. En su primer largometraje como escritor y director, Joseph Gordon-Levitt nos muestra que se las arregla para dejar el lugar común de las comedias románticas, realizando una película bien dirigida, llena de buenas actuaciones y con gran edición.
Para una primera incursión en la realización, termina haciendo más de lo que se le requiere. Don Jon es un drama romántico que pretende cortar con el pasado en la forma en que se concibe este género. Divertida y profundamente sincera en comentarios sociales y sensuales, provoca en la forma en que presenta la adicción a la pornografía. Un Gordon-Levitt que destruye su límite en versatilidad, tanto en la actuación como en la dirección.
The Lookout (2007)
Chris, un joven ex jugador de hockey, termina en un grave accidente automovilístico que causa daños irreparables a su memoria y le reduce su coeficiente de inteligencia, obligándolo a anotar hasta las cosas más simples en un cuaderno. Vive con su amigo Lewis, un hombre ciego, quien lo ayuda en el día a día. Su trabajo es simple: conserje en un banco. Sin embargo, su rutina tranquila se ve sacudida cuando se encuentra en medio de un plan de un atraco millonario. Mezclando elementos de Memento (2000) e Inside Man (2006) obtenemos este resultado de grandes actuaciones, tanto de Gordon-Levitt como de Jeff Daniels, Isla Fisher y Matthew Modine, en un thriller realista, oscuro y poético al mismo tiempo. Una trama soberbia que sabe asegurar el suspenso y mantiene el interés en todo momento.
Y ustedes, ¿recuerdan alguna más de este gran artista?
