Secciones
En la era de la información, esta noticia sí que es una sorpresa: Borat 2 ya fue filmada y hasta proyectada para para algunos ejecutivos de la industria, según confirmó este martes Collider.
Sacha Baron Cohen (Borat, Talladega Nights: The Ballad of Ricky Bobby, Hugo), quien interpretó al periodista de la televisión kazaja, está nuevamente presente en el film pero no hay muchas noticias sobre cómo se originó el proyecto ni qué productora está a cargo. Cabe destacar que 20th Century Fox se encargó de la primera parte, pero la compró Walt Disney Studios y uno no piensa que puede meterse en una película con clasificación restringida. Sin confirmar tampoco si aterrizará en los cines, la página deslizó que el estreno podría ser antes de las elecciones en Estados Unidos.
Ahora que Borat es reconocido por todos en los Estados Unidos, debe enfrentar lo opuesto al film original: pasar desapercibido por la gente. Más allá de que la trama no salió a la luz, algunas fuentes aseguran que lo que veremos es una suerte de Cohen interpretando a Borat interpretando a Cohen, anticipando la locura que representa todo eso.
Esta teoría parece reforzarse al ver al actor en los últimos meses haciendo un par de bromas en medio de actos sociales: Sacha estuvo en actos de grupos de extrema derecha cantando y utilizando una barba falsa, preguntándonos así si realmente no estaba filmando la secuela. Además, se hizo viral un video casero en el que aparecía el actor personificado y siendo grabando mientras manejaba una camioneta.
La película del 2006 dirigida por Larry Charles (Masked and Anonymous) y producida por el propio protagonista y Jay Roach (Trumbo, Game Change), que tiene como título oficial Borat: Cultural Learnings of America for Make Benefit Glorious Nation of Kazakhstan y fue filmada en formato de falso documental, fue un verdadero éxito que recaudó más de $261 millones de dólares y recibió una nominación al Oscar a mejor guion adaptado. Su humor irreverente provocó polémica en países como Alemania, Rusia y el propio Kazajistán, entendiendo que se burlaba de la sociedad de la región de Asia Central, aunque en los últimos años desde el gobierno kazajo admitieron que el film incrementó las visitas al país.
Los elogios a la película permitieron que Charles y Baron Cohen vuelvan a trabajar en proyectos como Bruno (2009) y The Dictator (2012) pero, a pesar de que las temáticas y los formatos fueran similares al del enamorado de Pamela Anderson, el éxito no fue tal.
